En el contexto de las constelaciones
familiares, se trabaja para reconocer y sanar estos movimientos interrumpidos,
permitiendo a la persona reconectar con su madre a nivel emocional y liberar
patrones negativos que afectan a su bienestar y a su sistema familiar en
general.
El papel de la madre y su aporte en constelaciones familiares
La madre transmite la energía
vital y el primer contacto con el mundo físico, por tanto, nos da las
relaciones con nuestro entorno. Ella significa la abundancia porque de ella nos
nutrimos en el vientre y generalmente nada nos falta en ese tiempo de
concepción.
Biológicamente, el vientre de
una madre es el lugar donde se lleva a cabo la gestación, se da vida para
continuar con la especie. Es el espacio en el que el embrión se desarrolla
hasta convertirse en un feto y finalmente en un bebé listo para nacer. Durante
aproximadamente nueve meses, el vientre proporciona un ambiente seguro, de
confort y nutriente para el desarrollo del nuevo ser, protege el feto del
ambiente externo y le suministra nutrientes esenciales a través del cordón
umbilical.
En las constelaciones
familiares, cada miembro de la familia tiene un lugar específico. La madre
ocupa una posición de gran importancia, y es esencial que esta posición sea
reconocida y respetada para mantener el orden y la armonía en la familia. Es
por esta razón que ante la perdida repentina de la madre en el parto o en los
primeros días de vida puede ocasionar un desorden jerárquico, alguno de sus hermanos tienden a ocupar
la posición de la madre.
El impacto de la perdida de la madre en los otros miembros de la familia
Generalmente cuando la madre
muere en el parto, los miembros de la familia, especialmente los otros hijos, inconscientemente
tienden a culpar al bebe por la pérdida, generando en el inconsciente de ese
nuevo integrante de la familia un sentimiento de culpa. En una edad adulta la persona
desarrolla patrones de dolor y sufrimiento que se reflejan en rabia hacia los
padres, soledad, abandono, baja autoestima, miedo al establecer relaciones
personales y en muchas ocasiones dificultad para alcanzar el éxito personal y
profesional. Esto puede llevar a que asuman responsabilidades excesivas a una
edad temprana, afectando su desarrollo emocional y su rol adecuado dentro de la
familia.
El Movimiento Interrumpido y la pérdida de la
madre son fenómenos profundos y complejos dentro de las constelaciones
familiares. Reconocer y sanar estas interrupciones es esencial para restaurar
la armonía y el equilibrio en el sistema familiar. Al abordar estas heridas
emocionales, no solo se libera al individuo de patrones negativos, sino que
también se promueve un entorno de sanación para todos los miembros de la
familia. La reconexión emocional con la madre, aun después de su pérdida,
permite una integración profunda y una liberación de cargas emocionales,
llevando a una vida más plena y equilibrada para todos los integrantes del
sistema familiar.
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